lunes, 6 de abril de 2020

Coronavirus, parte del 5 de abril

Photo by CDC on Unsplash

La lectura del informe diario que el Centro de Estudios del Sindicato Médico de Granada elabora con los datos del Ministerio de Sanidad me lleva a dos conclusiones. La primera es que la situación está encarrilada, aunque aún existe un riesgo cierto de que se vuelva a desmadrar. La segunda es que, por esa razón, las medidas de control seguirán todo mayo con un relajamiento mínimo. Igual se igualan los derechos civiles de los niños a los perros y pueden salir respetando el confinamiento. Pero poco más. 
El número de contagios sigue aumentando y ya son 130.759, con un aumento diario del 4,83%. Los hospitalizados alcanzan las 58.744 personas. Esto representa el 44,92% de los positivos reconocidos. Una cifra alta y que revela la gravedad de la infección, pero también que no se están haciendo test a personas asintomáticas y de prevención al personal sanitario, de todos los estamentos. En la medida que tengamos más positivos asintomáticos, se reducirá el porcentaje de ingresos. La última que hice esta estimación estaba en un 48%. Es evidente que se ha producido una disminución, que será mayor en la medida en la que se disponga de más datos.
La llegada de enfermos a la UCI se sigue produciendo. De una manera más lenta, pero ya estamos en 6.861 ingresos en toda España. La cifra es para temblar y la marea sigue creciendo. En Asturias estamos en 90 pacientes con una capacidad-UCI de 105. Es decir, ya casi al límite lo que implicará que, a lo largo de esta semana, haya que usar los recursos extraordinarios. Se han preparado con tiempo suficiente y es de alabar la buena gestión de políticos y sanitarios, la gente del Servicio de Salud del Principado (SESPA) están haciendo un buen trabajo y los ciudadanos debemos responder manteniendo el confinamiento, las normas de higiene y evitando que los mayores salgan a la calle.
El número de fallecidos sigue al alza. 12.418 vidas ya lleva esta epidemia. Cuando hablábamos de la gripe, teníamos la referencia de las 6.000 muertes de la pasada temporada gripal, con la diferencia de que ésta había sido en cinco-seis meses, mientras que aquí estamos en un par de meses. No me extrañaría terminar con 20.000 muertos. No soy sanitario, ni epidemiólogo, pero vamos a seguir sufriendo.
El único alivio es el incremento de personas curadas, que se mantiene al alza desde el día 26 de marzo. Ya estamos en 38.080 curados, con todo lo que supone de alivio para las familias y también para los profesionales sanitarios. 
Despido por hoy con los habituales consejos, el disclaimer que se dice en el mundo anglosajón. Recuerden:

  1. Mantener las normas de higiene, distanciamiento social y confinamiento.
  2. En caso de dudas, consulten con su médico de familia.
  3. El autor, o sea yo, no es un profesional sanitario y es el único responsable del análisis de los datos.

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